Gracias al
surgimiento de las nuevas tecnologías, y sobre todo el de Internet, ha florecido
una nueva etapa en el mundo de los medios de comunicación. Se ha pasado de un panorama en donde los
grandes medios de comunicación controlaban todo el proceso informativo y donde
los ciudadanos eran meros receptores pasivos, a uno en el cual la
participación ciudadana está a la orden del día. El surgimiento del periodismo
ciudadano constituye una nueva etapa donde el uso masivo de las TICs y el
gigantesco volumen de información, a la que la gran mayoría tiene acceso, hace
que los roles tradicionales de la profesión periodística se alteren y a través
del ciberespacio, los usuarios puedan manejar, distribuir e incluso producir
información.
Se ha roto con el esquema emisor-receptor, haciendo que
todos los ciudadanos se conviertan en emisores potenciales. Las razones del surgimiento de
estos nuevos perfiles se pueden relacionar con el desencantamiento de la
población con los medios de comunicación tradicionales y el surgimiento de las nuevas
tecnologías. Los ciudadanos cansados de ser meros receptores de la información,
a través de Internet buscan informaciones alternativas, que los medios tradicionales no
recogen, u otros enfoques a los que suele haber en los medios. Los informadores
no profesionales utilizan las herramientas que les facilita la web 2.0 como son
las redes sociales, blogs o webs contenedoras de este tipo de informaciones.
Esta democratización
de los contenidos, surgida dentro del contexto de la sociedad de la información, ha servido para llevar la libertad de expresión a aquellos lugares en la que no
existía. El periodismo ciudadano se encuentra bajo el amparo del Artículo 19 de
la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que establece:
Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión;
este derecho incluye el no ser molestado a causa de sus opiniones, el de
investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin
limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.
Por otro lado,
muchos profesionales del mundo del periodismo han tachado este movimiento como
intrusismo, en donde este tipo de actores no poseen de una formación
específica, ni tienen una dedicación exclusiva y por
último no existe una integración profesional con los periodistas de los medios
tradicionales.
A pesar de todo
esto, hay que destacar el servicio que ha prestado el periodismo ciudadano,
sobre todo a partir del surgimiento de las redes sociales y las mejoras en las
tecnologías móviles permitiendo que cada individuo sea un reportero en potencia
y que se pueda informar a tiempo real de lo que está sucediendo en cualquier
parte del mundo. Actualmente el caso más significativo de la importancia que
tiene el periodismo ciudadano ha sido dentro del conflicto de Siria. Ha florecido un ciberactivismo dentro del país que ha utilizado todas estas herramientas tecnológicas para difundir las
atrocidades que se están viviendo dentro de este país. Sus vídeos, tweets
y fotos se han convertido en un testimonio que no ha podido ser censurado y que han traspasado fronteras.